Como
podemos observar en nuestro día a día el mundo está cambiando y gracias a ello
cada vez le damos más importancia a las emociones o a como nos sentimos, en
definitiva, creo que identificar estos estados anímicos nos puede ayudar a
evolucionar interiormente. Por ello, me gustaría dedicar esta entrada a hablar
sobre las emociones, dado que en mi futura docencia tendré que ayudar a los
pequeños a que exterioricen sus sentimientos pero todo ello no será posible si
previamente no he trabajado sobre lo que yo siento y cuáles son las formas que
tengo de exteriorizarlo. Navegando por la red encontré un video que encuentro muy interesante como presentación a las emociones.
El
primer día de clase el profesor nos hizo la siguiente pregunta ¿Qué son las
emociones básicas o primarias? En un primer momento las primeras palabras que
se me pasaron por la mente fueron, seguridad, felicidad y bienestar físico.
Pero reflexionando me di cuenta que el bienestar físico es somático. Asimismo,
la seguridad la definí como una emoción básica que nos otorga confianza en si
mismos para poder avanzar y la felicidad como emoción que nos hace sentirnos
mejor, pero en estos dos sentimientos también me di cuenta que había una
emoción madre o principal de las cuales salían, que es el amor.
Las
emociones básicas son aquellas que nos conectan a una realidad social , que
están interrelacionadas entre si, es decir, unas nos pueden llevar a otras en
décimas de segundo. Charles Darwin también decía que “los
principales actos de expresión que manifiesta el hombre y otros animales
inferiores son innatos o heredados”.
Si parto de esta idea, puedo comprender que las emociones primarias son innatas ya que una persona que nazca ciega hará los mismos gestos faciales cuando esta enamorada o cuando tiene miedo que una persona que lo ha visto todo desde su nacimiento y esta expresión no puede ser mera repetición dado que no tiene ningún modelo a seguir. Los claros indicios físicos pueden ser mundialmente reconocidos por los emoticonos ya que gestualmente son emociones que expresamos igual.
Si parto de esta idea, puedo comprender que las emociones primarias son innatas ya que una persona que nazca ciega hará los mismos gestos faciales cuando esta enamorada o cuando tiene miedo que una persona que lo ha visto todo desde su nacimiento y esta expresión no puede ser mera repetición dado que no tiene ningún modelo a seguir. Los claros indicios físicos pueden ser mundialmente reconocidos por los emoticonos ya que gestualmente son emociones que expresamos igual.
La
verdad que nunca me había puesto a pensar en que trabajar las emociones puede
ser tan importante y por ello mi punto de partida en cuanto a esta temática la
tengo que reforzar con práctica y teoría. También he comprendido que necesito
escuchar más y tener una alto nivel de empatía hacía mis compañeras, amigos y familiares. Ello me ayudará en mi futura
profesión con los distintos modelos familiares o culturas en las que nos
encontraremos dentro de las aulas.
Silvia Palou en su libro "Sentir y Crecer", nos aporta reflexión, análisis y recursos sobre las vivencias emocionales y afectivas. Además, para ella hay cinco emociones primarias el amor, el miedo, la rabia, la tristeza y la alegría.
Amor
Para alcanzar el equilibrio es necesaria la unión interpersonal del amor maduro, pero hay que tener cautela para no caer en el amor inmaduro ya que se daría una sumisión de uno de los sujetos.
Desde mi punto de vista, esta emoción es la más importante, es el instinto más primitivo, es decir, gracias a él la raza humana ha permanecido unida por el apego ante las adversidades y también ha abierto la puerta a la reproducción de la especie.
Miedo
Es un sentimiento que nos pone en alerta, nos motiva y al mismo tiempo es socializador pero siempre con cierta prudencia o cautela, del mismo modo cuando tenemos recelo a que suceda lo contrario de lo que deseamos nos ponemos con un escudo protector llamado miedo.
En mi experiencia personal como madre he podido observar que las experiencias desagradables que viven los niños también pueden cumplir las funciones de supervivencia, por ejemplo cuando mi pequeña rechazaba acercarse a ciertos animales, sin embargo cuando este miedo sobrepasa un grado medio se pueden desarrollar fobias y ansiedades que pueden ser muy negativas.
Análogamente, Theodore Ribot, dice que “nuestra personalidad envuelve en su profundidad el origen de la gran trinidad afectiva constituida por el miedo, la cólera y el deseo: son los tres instintos nacidos directamente de la vida orgánica: instinto defensivo, instinto ofensivo, instinto nutricio”.
Dicha puede ser consecuente de una situación estresante y el modo en que los niños manifiestan la rabia suele ser muy inquietante para los adultos, pero como futura docente y madre tengo que lidiar con ellas. Sin embargo, puede ser una función importante que de energía positiva, así cuando un niño tiene rabia por alcanzar un objeto, la emoción le ayudará a resolver su problema.
Tristeza
Es un sentimiento que se desarrolla tras una pérdida y hay que tener claro que al negarla no obtendremos la felicidad. Punset en uno de sus entradas habla sobre la tristeza y comenta que “…hoy sabemos que la mala gestión de las emociones durante la infancia es el germen abonado para la droga y el comportamiento..” con ello quiero decir que tenemos que pararnos a pensar antes de decirle a un niño que no llore más ya que el pequeño esta exteriorizando sus sentimientos.
Alegría
Es un entado positivo inducido por alcanzar metas, deseos o aspiraciones. No hay emoción más motivadora, como futura docente esta emoción será uno de los pilares básicos. Loris Malaguzzi puso una frase presidiendo una escuela de Reggio que dice “NADA SIN ALEGRÍA”, en otras palabras como futura educadora mis propuestas han de tener siempre una base de placer de educar y aprender.
Todas estas emociones han sido elaboradas con una profunda reflexión del capítulo de la alquimia de las emociones y las aportaciones realizadas por mis compañeros de clase, pero tengo que decir que en esta búsqueda ha encontrado autores que no las respaldan.
Es más, hay teóricos que consideran que hay 8 emociones básicas. Plutchik ha expuesto una de las teorías mejor desarrolladas, él utiliza un círculo de emociones con colores en la que cada una tiene su lugar. Por ejemplo, el amor es una primaria que se desarrolla a través de la alegría la aceptación o la culpa está formada por la alegría y el miedo.
En conclusión, esta entrada me ha abierto los ojos en una nueva vía de investigación novedosa en la que se resalta la importancia de la educación emocional como eje vertebrador de nuestra sociedad, de sus cambios y que nos hace repensar la educación.
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